Cuando las discotecas echan el cierre, los aviones regresan a sus casas a todos los turistas y las playas se quedan desiertas renace una Ibiza llena de paz y serenidad. Una cara totalmente diferente a la que todos conocemos del verano, una Ibiza llena de tradiciones, costumbres, belleza natural y cultura renace para darle a todos los residentes y, menos habituales, turistas. La Ibiza de interior tiene multitud de planes para disfrutar en otoño. ¿Quieres saber nuestros planes estrella del otoño en Ibiza?
Deportes al aire libre
Una de las actividades que más practicamos los isleños es el deporte al aire libre, nos encantan los paseos después de una buena comida, las rutas en bici, kayak… La temperaturas son de lo más agradables, días soleados en los que aún nos damos algún chapuzón y temperaturas fabulosas para practicar varias rutas. Una ruta preciosa que podéis realizar subidos a una bici es la “Ruta 17”, esta ruta atraviesa las dos zonas llanas de interior ubicadas en el noroeste de Ibiza: Pla de Corona y Pla de Sant Mateu. En esta ruta pedalearemos entre campos de almendros y plantaciones de vid. Encantadora.
Descubrir el Parque Natural de Ses Salines y alrededores
La calma que se respira en playas tan famosas y concurridas en verano como Es Cavallet, la playa de Ses Salines o Es codolar ya de por sí resultan mágicas, pero y si además te decimos que podrás visitar el Parque Natural donde encontramos las grandes praderas de Posidonia declaradas Patrimonio Mundial por la Unesco ubicadas en los fondos marinos entre Ibiza y Formentera o la torre de vigilancia de Sa Sal Rossa, la encantadora iglesia de Sant Francesc de s’Estany (donde encontraremos en Centro de Interpretación, aquí nos ayudarán a descubrir todos los puntos de este parque natural), también merece la pena visitar la la capilla de Sa Revista y otra torre de vigilancia antes de llegar a Playa d’en Bossa: la torre de Ses Portes… El día otoñal parece presentarse magnífico ¿verdad?
Que llegue el otoño no significa que no haya diversión
La noche ibicenca en los meses de otoño e invierno no tiene nada que ver a la locura de los meses estivos pero sin duda gusta por igual. La ciudad de Ibiza, capital de la isla es punto de reunión de residentes durante las noches. Comer unos pinchos con los amigos, dar un paseo por las murallas silenciosas de Dalt Vila, comprar un cucurucho de castañas asadas en Vara de Rey y tomar una copa en la concurrida Plaza del Parque puede ser un viernes de 10. Para los que quieran seguir con la fiesta, debéis recordar que Pacha abre durante todo el año, ¡para que no echéis de menos las largas noches de verano!
El buen comer llega con las matanzas
Con la llegada del invierno muchas familias ibicencas siguen celebrando la tradicional matanza del cerdo. Esta trata de una reunión festiva de toda la familia, vecinos y amigos en la que todos se reúnen para llevar a cabo la matanza del cerdo y elaborar embutidos y demás alimentos provenientes del cerdo. Después de todo el trabajo realizado toda la familia disfruta de platos abundantes típicos de la gastronomía ibicenca acompañados de música y juegos tradicionales, pero tambien nuevos juegos incluyendo servicios de lol community. Si tienes la ocasión no te la pierdas, en comidas así podrás entender y conocer a fondo las raíces ibicencas.
Son meses para la cultura
El norte de Ibiza esconde pequeños tesoros históricos y lugares de interés que bien valen una visita. Preciosas iglesias, cuevas, torres para defenderse de los piratas, poblados antiguos… Ideales para visitar durante estos meses. Aquí va nuestra lista de lugares obligatorios con valor cultural en el norte de Ibiza:
- Iglesia de Sant Miquel de Balansat
- Poblado viejo de Balàfia
- Cova des Culleram
- Torre defensiva de Balansat o des Molar
- Iglesia de Sant Joan de Labritja
Si quieres saber más de estos lugares haz click aquí
Puestas de Sol: Las mejores de todo el año
Sí, en otoño e invierno se pueden ver las más bonitas puestas de sol de todo el año, y no porque la afluencia de visitantes es inferior, que también. Es porque las temperaturas son mucho más bajas, lo que propensa a ver con más claridad los colores que el astro rey va dejando en su despedida. Sin duda una recarga de pilas y un espectáculo muy especial. Por ejemplo, si vemos la puesta de sol desde el lado más al sur de la isla podremos observar fácilmente la isla de Formentera, o si lo hacemos desde el extremo oeste y el día está despejado podremos avistar claramente la Península y su silueta montañosa.