Como sabemos que los platos preparados con esmero y que recuerdan a la esencia de Ibiza siempre gustan a todos, hoy queremos seguir mostrándote los restaurantes con más solera de Ibiza.
Establecimientos que tienen una historia detrás y que año tras año han sabido forjarse la fama que solo los establecimientos más antiguos de la isla consiguen. Disfruta a cualquier hora del día de las sabrosas propuestas que estos restaurantes más veteranos prepararán para ti, como han hecho toda la vida: con mimo y tradición.
Ca n’Alfredo
En plena paseo de Vara de Rey encontramos uno de los restaurantes más emblemáticos de la isla, Ca n’Alfredo, sirviendo lo mejor de la cocina mediterránea e ibicenca desde 1934 cuando era conocido como “Restaurante Verner y Gertrudis”. El nuevo nombres se debe a el hijo mayor de una familia alemana que huyó de la Alemania nazi para regentar el establecimiento en 1936. Finalmente en el año 1941 la familia Riera tomó el testigo y hasta día de hoy van ya tres generaciones que se han volcado en el negocio. ¿Y qué tiene de especial Ca n’Alfredo? Pues en esencia, todo lo que un buen negocio debe aspirar: ofrecer un buen servicio, cocinar buenos platos ibicencos y mediterráneos y utilizar los mejores productos de la tierra, las tres reglas básicas que siempre se ha marcado Ca n’Alfredo.
Es Ventall
La familia Boned es la que inauguró en 1982 un pequeño restaurante de cocina ibicenca en el corazón de Sant Antoni. Su objetivo era hacer platos de calidad a partir del recetario tradicional de la isla, platos llenos de sabor que deleitan hasta los paladares más entendidos en la gastronomía autóctona, platos elaborados en su cocina de carbón. El gran cambio de este restaurante de toda la vida llegó de la mano del hijo de la familia que en 2005 volvió a la isla tras formarse en la península en restaurantes de primera categoría. Ahora la gastronomía tradicional de Es Ventall se fusiona con las técnicas más novedosas para ofrecer platos sofisticados pero sin perder de vista el sabor de la tradición.
Can Berri Vell
Un lugar lleno de historia lo encontramos en la antigua casa de Can Berri Vell, una de las familias más importantes del pueblo de Sant Agustí que ostentaban la privilegiada posición sitúa frente a la iglesia del pueblo. Esta casa de más de 400 años aún conserva toda la esencia de la arquitectura ibicenca, con sus paredes encaladas, sus vigas de sabina y distintas herramientas del campo que nos teletransportan a un pasado más bucólico. Cenar en su patio es todo un placer para los sentidos, porque además de estar en un ambiente de lo más acogedor podrás disfrutar de la mejor gastronomía que el chef Bruno prepara con esmero cada noche. La Casa de Can Berri ha sido referencia arquitectónica para multitud de aparejadores y aparece en la «Guía de Arquitectura de Eivissa y Formentera» de Elias Torres.
Ca na Ribes
Bartolomé Tur Clapés fundó en 1926 un restaurante de auténtico sabor ibicenco en pleno pueblo de Santa Eulàlia, uno de los más antiguos de la isla en activo. Ahora lo gestión corre a cargo de la misma familia, participando de ella hasta la bisnieta del fundador con la intención de mantener la esencia del principio, preparando diariamente platos de toda la vida aunque la carta cambie constantemente. Visita Ca na Ribes en la concurrida calle de Sant Vicent donde se ubican la mayoría de restaurantes de Sant Eulàlia y disfruta de sus platos ya sea de su terraza exterior, su acogedor comedor o el maravilloso patio interior donde encontrarás toda la intimidad necesaria para una cena de ensueño.
Restaurante 2000
Restaurante 2000 es uno de los establecimientos con más tradición del norte de la isla, en la playa de Benirràs. A primera vista parece cualquier otro local de cocina marinera pero aquí llevan perfeccionando la técnica desde 1979, ¡van muchos años de experiencia! El secreto de sus deliciosos arroces y platos de pescado fresco se esconden en el género, pescado diario por dos llaüts de la familia Escandell, la misma que dirige el restaurante, que abastecen en exclusiva a su propia cocina. Además el Restaurante 2000 elaboran su propio ‘peix sec’ (pescado seco), un ingrediente muy apreciado en su ensalada de crostes.