La cala de Benirràs, está situada frente al sol de poniente, a unos 7,5 km de Sant Miquel de Balansat, entre las puntas de Cova de s´Orenga y punta Blanca en la costa norte de Ibiza.
Un bello recorrido en coche, por colinas y valles, hasta llegar a la playa, y a la que se accede desde la carretera de Sant Joan de Labritja, o desde el Port de Sant Miquel
Benirràs es una pequeña cala arenosa en forma de bahía e incrustada en un bello paraje silencioso. Dominada por la presencia de un singular islote conocido por Cap Bernat, que ha dado lugar a múltiples fábulas y mitos. Una profunda manga de mar y tierra virgen, envuelta por acantilados cubiertos por un manto de pinos y frondosa vegetación. Playa de arena tostada, escasa pendiente y aguas transparentes. Pese a ser una cala de gran belleza natural, no es una de las playas más cómodas de la isla ya que la entrada del mar esta salpicada por gran numero de rocas y su orilla es de grava.
Un perfecto sitio para la práctica del snorkel, por su increíble fondo marino. Asimismo, es conocida por los pescadores locales como “port de Benirràs”, al ser un abrigo natural donde poder proteger sus embarcaciones de los fuertes temporales.
En verano, cala Benirràs es un habitual punto de amarre de barcos y yates, frecuentada por todo tipo de público que desea admirar desde la arena el ocaso diario que presenta un magnífico espectáculo de luz y percibir las distintas tonalidades de color que adquieren el cielo y el mar.
Las tardes de los domingos, la puesta de sol es acompañada por unos vibrantes e improvisados sonidos de tambores que golpean numerosos percusionistas, un auténtico ambiente bohemio. Aunque la fiesta comenzó de manera espontánea por un grupo de hippies que encontraron en este lugar un punto mágico gracias a la luz del ocaso actualmente es todo un acontecimiento que pocos se pierden.
El hecho de que esta fiesta haya adquirido tanta fama, nos obliga a advertiros de la gran afluencia de gente que encontraréis los domingos por la tarde.También debéis saber que el tráfico queda restringido desde el mes de junio hasta octubre los domingos. Así, sólo podrán pasar a la cala los vehículos de emergencia, vecinos acreditados y los autocares de línea regular. Nosotros os recomendamos, sin duda, acudir en autobús de línea. Mucho más rápido y cómodo.
En esta pequeña cala encontraréis artesanos, de aires hippies, donde venden todo tipo de piezas y productos manufacturados por ellos mismos, brazaletes, collares, marroquinería, tobilleras.
A pie de playa, coexisten dos restaurantes, el Roca y Mar, y el Restaurante 2000, los cuales ofrecen una cocina marinera propia basada en sabrosos arroces, pescados y mariscos frescos extraídos directamente del mar, pescados al día de forma artesanal. Además, encontramos un beach club de nombre Elements, en el que encontramos cocina mediterránea con raíces de Italia gracias a su chef Mauro Di Mauro. Aquí encontraremos pastas caseras hechas cada día acompañadas de las hierbas aromáticas de sus jardines orgánicos.