Algo muy visible actualmente en las calles de Ibiza, es el nacimiento de muchos restaurantes especializados en una cocina orgánica, natural y de productos ecológicos directos de la huerta.
Y es que los clientes cada día son más exigentes y buscan disfrutar de la gastronomía de la isla a la vez que se cuidan y mantienen hábitos saludables y son muchos los lugares que dan respuesta a esta demanda ofreciendo platos originales y llenos de sabor. Aquí te proponemos cinco restaurantes donde degustar el lado más saludable de la isla.
Aubergine Ibiza
En pleno paisaje rural entre Santa gertrudis y Sant miquel, una pequeña casa payesa alberga un nuevo restaurante con el nombre de Aubergine que cuenta también con su propia boutique. Este lugar se ha inaugurado esta misma temporada 2015 pero ya se augura un éxito más que asegurado. Su original propuesta se basa en una amplia gama de productos orgánicos y ecológicos preparados con delicadeza para elaborar platos principalmente veganos y vegetarianos llenos de sabor y vitaminas. Sin duda este es uno de los sitios perfectos para recrearse en el movimiento “slow” pues su estilo culinario y el ambiente campestre que se respira te obligan a parar y disfrutar del momento.
Passion Café
Passion Café es un conjunto de establecimientos repartidos por la isla que tienen como propósito principal ofrecer platos sanos donde los vegetales crudos son los ingredientes principales. Recetas vegetarianas, veganas, macrobióticas y también exóticas son las que pueblan las cartas de sus distintos establecimientos.
Si quieres disfrutar de la fresca y saludable propuesta de Passion Café, podrás encontrar sus restaurantes ubicados en Santa Eulàlia, Marina Botafoch, Platja d’en Bossa y su última apertura ha sido en el conocido gimnasio Bfit donde también preparan menús adaptados a las necesidades de cada deportista.
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La Paloma Ibiza
Sant Llorenç es uno de esos pueblos del norte de la isla con mucho encanto y es por eso, que se trata del lugar idóneo para que un restaurante como la Paloma se ubique. Instalado en una casa payesa próxima al diminuto núcleo del pueblo, La Paloma es una maravilla para disfrutar del campo ibicenco pues sus mesas se dispersan bajo la sombra de algarrobos y naranjos con el sonido de los pájaros de fondo.
La comida que se sirve aquí va acorde con el ambiente rural que se respira pues los platos están hechos con los mejores productos orgánicos y naturales y sobretodo de temporada pues muchos vienen directo de su huerta o de sus corrales. Aquí cualquier hora es buena para venir a comer: desayunos de fruta fresca y pan horneado en el mismo restaurante y almuerzos o cenas con una variada carta, sobretodo de influencia italiana, que va cambiando en función de las ideas del chef y de los productos disponibles.
The Giri Cafe
En el corazón de Sant Joan encontramos un original concepto de restaurante: The Giri Café, un lugar a camino entre la tradición ibicenca y la cocina con un toque exótico. Este impresionante restaurante está decorado con mucho gusto pero probablemente el espacio más llamativo sea su terraza donde puedes degustar su variada carta tumbado en una cama balinesa y rodeado de tomateras y plantas aromáticas sembradas en el mismo jardín.
El secreto del sabor de su cocina es el cultivo propio de los ingredientes orgánicos y el mimo al producto ibicenco que la da una pincelada autóctona a sus creativas propuestas. Y por supuesto, todo lo que aquí se prepara “se hace con amor” como dice la pizarra que cuelga en la puerta, así que si buscas un lugar de cocina elaborada, además de sana, The Giri Cafe es tu lugar.
The rabbit hole
“100% cruelty free” así reza la filosofía del original restaurante The rabbit hole, un pequeño rincón de Sant Rafel donde disfrutar de la más auténtica comida vegana llena de sabor y de creatividad. Platos como su sushi vegano, el queso vegano especialmente preparado en este restaurante y sus sabrosos pasteles, por supuesto veganos, son sus especialidades. También podrás disfrutar de sus adictivos smoothies perfectos para combatir el calor del verano.
Otro punto a favor de este lugar tan especial es su ubicación, pues se encuentra en pleno núcleo de Sant Rafel y cuenta con una terraza de ensueño a la sombra de una parra y una sala del té que parece salida de un cuento. También encontrarás una pequeña sección donde comprar tus propios productos veganos para que experimentes en tu cocina. En definitiva, un lugar que demuestra que la ética animal y la cocina de calidad no tienen porqué estar reñidos.