Situado en el norte de la isla, muy cerca de Sant Miquel, Can Planells es un precioso agroturismo que antaño fue una casa payesa. Es un auténtico remanso de paz rodeado de naranjos y limoneros en el que disfrutar de la Ibiza más rural.
Y a tiro de piedra de algunas de las playas más impresionantes de la isla y de atractivos culturales como las cuevas des Culleram, el pueblo-fortaleza de Balàfia o las torres de defensa que protegían Ibiza de ataques piratas.
Además de la tranquilidad y la belleza de Can Planells otro de sus grandes atractivos es la comida casera, elaborada con productos naturales y sanos de la isla, algunos incluso cultivados en el propio agroturismo. En Tripadvisor la mayoría de los clientes que han pasado por allí destacan el desayuno que se sirve en la agradable terraza, situada en pleno campo y con vistas a la preciosa vegetación circundante.
Una de las cosas que más resaltan los que han pasado por el agroturismo son los zumos naturales, elaborados algunos con ingredientes procedentes de la propia finca de Can Planells, como limones y naranjas. Otra delicia son las mermeladas de albaricoque, naranja, ciruela o limón caseras que elaboran ellos mismos con productos del propio huerto. Asimismo, se pueden probar otras mermeladas fabricadas en la isla, como las de Can Malacosta, de higos o melocotón. Otra opción es el pan casero con tomate con jamón serrano, con todo tipo de quesos (algunos también de Ibiza) o incluso se pueden probar los productos típicos de la matanza del cerdo ibicenca como son la sobrasada o la butifarra.
La tostada estrella es la de pan con tomate, aguacate cultivado en el propio huerto y anchoas. Hay que destacar que todo está elaborado con pan payés casero y aceite oliva virgen extra procedente de la almazara ibicenca de Can Garrovers. Deliciosos croissants de jamón y queso, salchichas, bacon, huevos de corral cocinados de todas las formas (fritos, revueltos, hervidos o pochados) y ensalada de frutas con muesli y yogur son otras de las propuestas de Can Planells para empezar bien el día y para que no nos falte la energía.
Otra cosa que no hay que perderse son los pasteles y bizcochos caseros de zanahoria, limón y chocolate elaborados según la receta de la abuela, las galletas y madalenas caseras o postres típicos de la isla como son el flaó y las orelletes. Además de todo ello se puede disfrutar de todo tipo de cafés y tés.
Algo que destacan mucho los clientes que han pasado por Can Planells, además de la tranquilidad y la amabilidad en el trato de Joan, es la limonada casera y fresca para aliviarse en las horas de más calor y que se sirve directamente en la piscina. Un placer para los sentidos sano y natural.